Una Nueva Era para el Atlético: Apollo Sports Capital Toma el Control y Expande su Influencia a México

El club de fútbol Atlético de Madrid ha entrado en una nueva etapa histórica tras anunciar que el grupo inversor estadounidense Apollo Sports Capital se ha convertido en su accionista mayoritario, una operación que extiende su control a las filiales del club en México y Canadá.

El 10 de noviembre de 2025, el Club Atlético de Madrid oficializó un acuerdo para que Apollo Sports Capital (ASC), la división deportiva del fondo estadounidense Apollo, adquiera una participación mayoritaria en la entidad. A pesar del cambio en la estructura accionaria, se garantiza la continuidad institucional, ya que Miguel Ángel Gil Marín y Enrique Cerezo conservarán sus cargos como consejero delegado y presidente, respectivamente, además de permanecer como accionistas. La transacción no solo afecta al club madrileño, sino que también otorga a ASC el control sobre sus filiales internacionales: el Atlético de San Luis en México y el Atlético Ottawa en Canadá.

Los anteriores socios mayoritarios, como Quantum Pacific Group, Ares Management y Wanda Group, reducirán su participación pero se mantendrán como inversores minoritarios.

El objetivo declarado de esta alianza es reforzar la solidez financiera, la competitividad deportiva y la expansión internacional del club. Uno de los proyectos clave impulsados por esta nueva asociación es el desarrollo de la "Ciudad del Deporte", un ambicioso complejo que se construirá junto al Estadio Riyadh Air Metropolitano. Según Gil Marín, la llegada de Apollo Sports Capital suma "recursos, ambición y estabilidad a largo plazo", manteniendo la esencia y la pasión del club como pilares fundamentales. Aunque las cifras económicas del acuerdo no se revelaron oficialmente, la prensa española ha tasado al Atlético en aproximadamente 2.5 millones de euros. La operación está sujeta a aprobaciones regulatorias y se espera que se concrete en el primer trimestre de 2026. Es de destacar que ASC ya había mostrado interés en el fútbol mexicano previamente, al intentar sin éxito la creación de un Fondo de Inversión para la Liga MX, un proyecto que no prosperó por falta de acuerdo entre los dueños de los clubes. Esta adquisición marca, por tanto, su llegada formal a la gestión de un equipo en México.