Entre Tasas a la Baja y Créditos Cuestionados: El Doble Desafío del Sector Bancario Mexicano

El sector financiero mexicano enfrenta un panorama complejo, marcado por la reducción en las ganancias de la banca privada y la política monetaria del Banco de México, a la vez que surgen controversias sobre el manejo de créditos en la banca de desarrollo.

La banca en México navega un entorno económico desafiante, definido por la estrategia de flexibilización monetaria del Banco de México (Banxico) y una contracción en la rentabilidad del sector privado. La gobernadora de Banxico, Victoria Rodríguez Ceja, ha señalado como “altamente probable” un nuevo recorte de 25 puntos base a la tasa de interés en diciembre, con la posibilidad de que cierre el 2025 en 7.0%. Esta medida daría continuidad al ciclo de recortes que inició a principios de 2024, llevando la tasa a su nivel actual de 7.25% en respuesta a una inflación que se desaceleró al 3.57% anual en octubre y a una economía con crecimiento “moderado” que incluso se contrajo un 0.3% en el tercer trimestre. Este contexto de menor actividad económica y tasas de interés a la baja ha impactado directamente a los bancos privados.

Por primera vez desde 2020, el sector experimentó una caída real del 2.1% en sus utilidades netas acumuladas entre enero y septiembre.

La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) atribuye este resultado a dichos factores.

Instituciones como Banorte, Inbursa, Scotiabank y HSBC reportaron reducciones, mientras que las mayores pérdidas las registraron Ualá, Openbank y Banco Bineo.

En contraste, BBVA México se consolidó como líder del mercado con una utilidad de 74,213 millones de pesos, un incremento real del 1.4%.

Paralelamente, la banca de desarrollo enfrenta sus propios cuestionamientos.

Se reveló que el Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext) otorgó financiamientos por 21 millones de dólares en 2020 y 2023 a Naviera Integral. Dicha empresa, dirigida por Juan Pablo Vega Arriaga, empresario cercano al senador Adán Augusto López Hernández, ya estaba siendo investigada por la Fiscalía General de la República por su presunta participación en el tráfico de combustible. Además de los créditos, la naviera y su filial obtuvieron contratos con Pemex por más de 4 mil millones de pesos durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y más de 2 mil 100 millones en el primer año de la administración de Claudia Sheinbaum.