El Sol en el Punto de Mira: La Tierra se Prepara para una Tormenta Mientras una Misión Despega para Estudiar su Impacto en Marte

Mientras la Tierra se prepara para una posible tormenta geomagnética debido a recientes y violentas erupciones solares, la NASA y Blue Origin alistan el lanzamiento de la misión Escapade, diseñada para desentrañar cómo el viento solar despojó a Marte de su atmósfera.

El Sol ha registrado una intensa actividad al expulsar dos potentes llamaradas de clase X, la categoría más fuerte, los días 9 y 10 de noviembre de 2025. La Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) ha advertido que estas eyecciones de masa coronal podrían impactar la Tierra entre el 11 y el 13 de noviembre, provocando una tormenta geomagnética de categoría G3.

Aunque estos fenómenos no representan un riesgo directo para los seres vivos en la superficie, sí pueden causar interrupciones en las telecomunicaciones, dañar satélites y afectar las redes eléctricas.

También podrían generar auroras boreales visibles en Canadá y el norte de Estados Unidos.

En este contexto de actividad solar, la NASA y la compañía Blue Origin se preparan para lanzar la misión Escapade este miércoles desde Cabo Cañaveral, Florida, tras un aplazamiento por mal tiempo. El objetivo de esta misión es precisamente estudiar la interacción del viento solar con el campo magnético de Marte para comprender cómo el planeta rojo perdió su atmósfera y agua a lo largo de miles de millones de años, transformándose en el desierto helado que es hoy. La misión Escapade, con un costo de 49 millones de dólares, utilizará por primera vez dos satélites idénticos para observar simultáneamente la magnetosfera marciana desde distintos puntos, creando una visión tridimensional sin precedentes.

Los datos recopilados serán cruciales para prever las condiciones que enfrentarán los futuros astronautas en Marte y cómo protegerlos de la radiación espacial.

El lanzamiento también representa un hito para Blue Origin, ya que será el segundo vuelo de su cohete New Glenn. La compañía intentará recuperar la primera etapa del cohete en una plataforma marítima, una maniobra que no logró en su vuelo inaugural de enero. Además, la misión probará una nueva trayectoria interplanetaria que, en lugar de la tradicional maniobra de Hohmann, utilizará un punto de Lagrange.

Esta estrategia podría hacer los futuros viajes a Marte más frecuentes, flexibles y económicos.