Ofensiva migratoria en Nueva Orleans: la estrategia federal se intensifica en ciudades demócratas



El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos inició la operación “Catahoula Crunch” en Nueva Orleans, Luisiana, con el objetivo principal de detener a migrantes de Centroamérica y México que cuentan con historial criminal. Según el DHS, el operativo se enfoca en individuos liberados por las llamadas “políticas santuario” tras ser arrestados por delitos graves como invasión de hogar, robo a mano armada y violación.
La subsecretaria del DHS, Tricia McLaughlin, afirmó que estas políticas ponen en peligro a las comunidades y obligan a los agentes federales a arriesgar sus vidas para recapturar a “extranjeros criminales”.
Este despliegue no es un hecho aislado, sino que sigue un patrón de acciones similares impulsadas por la administración de Donald Trump en otras ciudades lideradas por demócratas. Previamente se realizaron operativos en Los Ángeles en junio, en Chicago en septiembre y en Carolina del Norte el mes pasado, donde la operación “Charlotte’s Web” resultó en la detención de 200 migrantes. Aunque no se ha especificado el número de agentes en Nueva Orleans, se reporta la posible llegada de elementos de la Patrulla Fronteriza. La medida ha generado una fuerte reacción en Luisiana, un estado con cerca de 223,000 inmigrantes, de los cuales una proporción significativa proviene de Honduras y México.
El temor a las redadas ha provocado que restaurantes y negocios latinos anuncien cierres temporales.
Activistas y organizaciones como FWD, presidida por Todd Schulte, han criticado la “crueldad y caos” del operativo, cuestionando que se enfoque únicamente en personas con antecedentes penales y pidiendo un trato digno para los migrantes.
La alcaldesa actual, LaToya Cantrell, es demócrata, y su sucesora electa, Helena Moreno, nacida en México, también expresó su preocupación.
Políticamente, la operación cuenta con el respaldo del gobernador republicano de Luisiana, Jeff Landry, un aliado de Trump que solicitó el despliegue. Adicionalmente, el presidente Trump anunció el próximo envío de la Guardia Nacional a Nueva Orleans para “combatir el crimen”, a petición del gobernador Landry.









