Aunque Samsung ya ha mostrado el dispositivo en Corea del Sur, lo hizo de forma limitada y sin revelar especificaciones técnicas.

No obstante, se anticipa que incluirá un procesador Snapdragon de gama alta, una configuración de triple cámara y una batería de mayor capacidad que los modelos plegables actuales. El lanzamiento inicial sería limitado, con una producción de entre 50,000 y 100,000 unidades, y su precio podría superar los 2,000 euros, posicionándolo como un producto de nicho y una vitrina tecnológica para la compañía. Con esta apuesta, Samsung no solo busca mantener su dominio en el segmento de plegables, sino también explorar nuevos formatos que podrían marcar el futuro de los dispositivos móviles.