Su diseño y características marcan una nueva dirección estratégica para la compañía, enfocada en un balance entre estética minimalista y rendimiento de alto nivel. Con un grosor de apenas 5.6 milímetros y un peso de 165 gramos, el iPhone Air ha sido rediseñado por completo para lograr su delgadez. Está construido sobre un chasis de titanio de grado cinco y cuenta con protección Ceramic Shield 2, que según Apple, es cuatro veces más resistente a roturas. Este enfoque en el diseño implicó ciertos sacrificios: el dispositivo cuenta con una sola cámara trasera de 48 megapíxeles, que utiliza el recorte del sensor para emular un zoom 2x, y una batería de menor capacidad, aunque Apple promete una autonomía de "un día completo" y hasta 27 horas de reproducción de video. A pesar de estas concesiones, el iPhone Air no escatima en potencia, ya que incorpora el chip A19 Pro, el mismo que los modelos iPhone 17 Pro, superando así al iPhone 17 estándar.

Su pantalla es una Super Retina XDR de 6.5 o 6.6 pulgadas con tecnología ProMotion de 120 Hz. Otra de las novedades más importantes, impulsada por su diseño, es la eliminación total de la bandeja para SIM física, funcionando exclusivamente con eSIM.

Además, estrena el chip N1, un cerebro exclusivo para gestionar todas las conexiones inalámbricas del dispositivo, como WiFi 7 y Bluetooth 6.