Estratégicamente, Apple ha reducido el precio del dispositivo en 300 euros en Europa, situándolo en 3,699 euros, mientras que en Estados Unidos se mantiene en 3,499 dólares. La mención del producto en la nota de prensa española de Apple ha alimentado especulaciones sobre una posible expansión internacional, un proceso logístico complejo que podría tardar hasta seis meses en materializarse.