El esfuerzo para mejorar Siri, liderado por ejecutivos como Mike Rockwell y Craig Federighi, permitirá al asistente realizar tareas más complejas, entender el contexto de las conversaciones y sintetizar información de manera más natural. Esta colaboración entre dos de los mayores rivales tecnológicos subraya la urgencia de Apple por ponerse al día en la carrera de la inteligencia artificial.