Este enfoque se alinea con la adopción del CarPlay clásico, en lugar del más inmersivo CarPlay Ultra, del cual otros fabricantes se han distanciado.

Aunque no hay una fecha de lanzamiento confirmada y el proyecto podría retrasarse o cancelarse, la simple exploración de esta posibilidad subraya la influencia del ecosistema de Apple en la industria automotriz y la necesidad de Tesla de adaptarse para mantener su competitividad.