Sin embargo, su elevado precio y su peculiar diseño han provocado una oleada de críticas y burlas en las redes sociales, donde los usuarios lo han comparado con un "calcetín caro". El iPhone Pocket es una funda tejida en 3D, inspirada en el concepto de "una sola pieza de tela", que funciona como un bolsillo adicional para llevar el iPhone y otros objetos pequeños. El accesorio está disponible en dos versiones: una con correa corta por 149.95 dólares y otra con correa larga por 229.95 dólares.

Su lanzamiento está limitado a ocho mercados seleccionados, entre ellos Estados Unidos, Japón, China y varios países europeos, dejando fuera a México.

La reacción del público ha sido mayoritariamente negativa, centrada en el desmesurado costo del producto.

Los internautas no tardaron en señalar que por el precio del "calcetín de Apple" se podría comprar un teléfono Android completo, y recordaron los iPod Socks de 2004, que costaban 29 dólares por un paquete de seis. A pesar de la controversia, este lanzamiento se enmarca en la estrategia de Apple de posicionar sus productos y accesorios en el mercado de la moda y el lujo, donde el diseño y la exclusividad son tan importantes como la funcionalidad. La colaboración con Issey Miyake, un diseñador admirado por Steve Jobs, refuerza esta visión de fusionar tecnología con alta costura, convirtiendo el iPhone en un objeto de estatus que se porta como una prenda más.