La propuesta de imponer nuevos aranceles a productos asiáticos y las tensiones comerciales globales están generando un clima de incertidumbre que amenaza con frenar la llegada de nuevas inversiones a México, a pesar del auge del nearshoring. Empresarios y analistas advierten que, si bien la Inversión Extranjera Directa (IED) ha mostrado cifras récord, gran parte de ella (84.4%) corresponde a reinversión de utilidades de empresas ya instaladas, mientras que la llegada de capitales nuevos ha tocado su nivel más bajo desde 2006. Amapola Grijalva Vega, presidenta de la Cámara de Comercio y Tecnología México-China, señaló que las nuevas tarifas ponen en “punto de espera” posibles inversiones chinas, cruciales para el desarrollo de cadenas de suministro. En regiones industriales como Monclova, el presidente de Canacintra, Jorge Mtanous, afirmó que la incertidumbre económica general, agravada por la falta de soluciones para AHMSA, ya ha frenado decisiones de inversión, y los aranceles no resuelven el problema de fondo.
“La gente no quiere invertir porque no sabe qué va a pasar con su dinero”, declaró.
De manera similar, en la región de Cuauhtémoc, Chihuahua, la amenaza de una cuota compensatoria por parte de Estados Unidos a la industria de remolques pone en riesgo 10 mil empleos y exportaciones por 450 millones de dólares anuales. Aunque el gobierno defiende los aranceles como una medida para fomentar inversiones bajo el Plan México, el sector privado teme que la falta de claridad y el aumento de costos terminen por disuadir a los capitales que buscan relocalizarse en el país.
En resumenA pesar del potencial del nearshoring, la incertidumbre generada por la nueva política arancelaria y las tensiones comerciales existentes está frenando la llegada de nuevas inversiones a México. Sectores empresariales de diversas regiones del país advierten que, sin un entorno de certeza regulatoria, los beneficios de la relocalización podrían no materializarse.