Esta estrategia busca crear un “cierre de filas” y una postura unificada del país.

Sin embargo, el proceso se desarrolla en un contexto de alta tensión. El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) señaló que la revisión del tratado, que se anticipa será una “renegociación más profunda”, es uno de los factores externos más retadores para la economía. La incertidumbre ha afectado las decisiones de inversión, como lo advirtió Rodrigo Sánchez Espinosa, presidente de Industriales Potosinos A.C., quien afirmó que “la falta de claridad ha retrasado proyectos desde febrero”. La industria automotriz, en particular, ha expresado su preocupación.

Ejecutivos del sector, durante el congreso CIAN, manifestaron inquietud por un posible endurecimiento de las reglas de origen, que actualmente exigen un 64% de contenido regional para vehículos pesados y que aumentará al 70% en 2027. Rogelio García, de la ANPACT, afirmó que “cambiar la regla ahora no es viable”, reflejando el sentir de una industria que ya enfrenta la amenaza de aranceles estadounidenses.