Este optimismo redujo la aversión al riesgo a nivel mundial, lo que benefició directamente a divisas de mercados emergentes como el peso mexicano.

Las bolsas de valores en Asia, Europa y América registraron sólidas ganancias tras conocerse los avances en las negociaciones. En Tokio, el índice Nikkei 225 superó los 50 mil puntos por primera vez en su historia, mientras que Wall Street alcanzó nuevos récords históricos por jornadas consecutivas.

Este ambiente positivo se debe a que las delegaciones de ambos países alcanzaron un "consenso preliminar" en Kuala Lumpur sobre temas clave como controles a la exportación, impuestos al transporte marítimo y cooperación en la lucha contra el fentanilo. La expectativa de un acuerdo definitivo se centra en la reunión que sostendrán Trump y Xi Jinping el jueves en Corea del Sur, en el marco de la cumbre de la APEC.

Para México, esta distensión comercial es una noticia favorable.

El peso mexicano se apreció frente al dólar, cotizando por debajo de las 18.40 unidades, ya que un menor riesgo global aumenta el atractivo de la moneda para operaciones de inversión. La presidenta Claudia Sheinbaum también contribuyó a la certidumbre al anunciar una prórroga en la aplicación de aranceles estadounidenses, lo que, sumado a la tregua sino-estadounidense, generó un entorno de mayor estabilidad para la economía nacional.