Sin embargo, la alianza estratégica entre Renault-Nissan y Daimler comenzó a debilitarse desde 2017.
El golpe final llegó con las presiones arancelarias de Estados Unidos, que buscan fortalecer la manufactura en su territorio. En un comunicado interno dirigido a proveedores, la compañía informó que la producción de modelos Infiniti concluirá en noviembre de 2025, mientras que la de Mercedes-Benz se extenderá hasta mayo de 2026.
La empresa aseguró tener “plena solidez financiera” para cumplir con sus compromisos contractuales.
El cierre de COMPAS ya había sido anticipado por recortes de personal en 2024, que afectaron a más de 1,200 empleados. Aunque la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) considera que el cierre no afectará la meta de producción nacional de 4 millones de unidades este año, la noticia genera una fuerte preocupación por la estabilidad laboral en Aguascalientes y subraya la vulnerabilidad de la industria mexicana ante las políticas comerciales proteccionistas de su principal socio comercial.













