A partir del 4 de noviembre de 2025, no se podrán importar vehículos con un peso bruto vehicular mayor a 3,857 kilogramos y una antigüedad superior a 10 años. El acuerdo, emitido por las secretarías de Medio Ambiente (Semarnat) y de Economía (SE), tiene como objetivo alinear la flota importada con la NOM-044-SEMARNAT-2017, que establece límites máximos de emisión de contaminantes y se basa en regulaciones de Estados Unidos y la Unión Europea. La secretaria de Medio Ambiente, Alicia Bárcena, advirtió que, aunque los vehículos de diésel representan solo el 5% de la flota, aportan el 61% de la contaminación del aire. Por su parte, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, estimó que la medida impedirá el ingreso de "miles de vehículos contaminantes" y mejorará la seguridad en carreteras. La Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) celebró la medida, calificándola como el resultado de más de dos años de trabajo técnico y diálogo. Según ANPACT, en 2024 la importación de vehículos pesados usados se triplicó, afectando la renovación de la flota nacional y a las micro, pequeñas y medianas empresas del sector.