Las exportaciones sufrieron una caída del 55.3%, mientras que las ventas al mayoreo se contrajeron un 61%.
Rogelio Arzate, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), describió el resultado como un reflejo del “ajuste en la demanda y un entorno de mercado más retador”. Esta crisis se atribuye a una combinación de factores, incluyendo la menor actividad económica en Estados Unidos y la incertidumbre generada por la política arancelaria de la administración Trump, que estableció una tarifa del 25% a la importación de camiones medianos y pesados a partir del 1 de noviembre de 2025. Aunque los vehículos que cumplen con las reglas de origen del T-MEC solo pagan el arancel sobre los componentes no estadounidenses, la medida ha pesado sobre el sector. La Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) lamentó que octubre registrara la décima tasa anual negativa del año en ventas al menudeo, con una caída del 45.5%. La situación es tan grave que empresarios la califican como un desplome que “no se vio ni en la pandemia de Covid-19”, evidenciando la profunda afectación de las políticas comerciales en una de las industrias más importantes para la exportación mexicana.













