Analistas atribuyen esta tendencia a la incertidumbre generada por las tensiones comerciales y la próxima revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

A pesar de este panorama, funcionarios mexicanos como el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, han asegurado que las exportaciones del país continúan creciendo. Sin embargo, la percepción de riesgo persiste en el sector privado; una encuesta de HSBC revela que el 34% de las empresas en México aún anticipa impactos negativos derivados de la incertidumbre arancelaria, una cifra superior al promedio global del 24%. Este escenario refleja la dualidad de la economía mexicana: cifras macroeconómicas récord en inversión extranjera directa coexisten con la volatilidad y el nerviosismo en los mercados de capital.