Este desempeño fue impulsado por una combinación de factores, incluyendo el rendimiento de acciones tecnológicas clave y las expectativas de políticas monetarias más flexibles. El principal indicador de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), el Índice de Precios y Cotizaciones (S&P/BMV IPC), superó por primera vez la barrera de los 61,000 puntos, cerrando la jornada en 61,553.58 unidades, lo que representó un significativo avance del 1.76%. Este hito fue impulsado por el buen desempeño de varios sectores, destacando las alzas en los títulos de Coca Cola Femsa (FEMSAUBD) con un 3.64%, Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAPB) con un 3.52%, y Grupo Carso (GCARSOA1) con un 3.13%. El optimismo en el mercado mexicano se alinea con la expectativa de que una eventual baja en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos inyecte mayor liquidez en la renta variable.

Paralelamente, en Wall Street, los tres principales índices también marcaron récords históricos.

El Promedio Industrial Dow Jones subió aproximadamente un 1.35% (o 613.97 puntos) para situarse en 46,104.89 enteros. El S&P 500 ganó cerca de un 0.84%, alcanzando las 6,586.74 unidades, mientras que el Nasdaq Composite avanzó alrededor de un 0.70% hasta los 22,039.60 puntos. El impulso en el mercado estadounidense fue notablemente apoyado por el sector tecnológico.

Las acciones de Tesla se dispararon un 6.04%, contribuyendo de manera importante a los máximos del S&P 500 y el Nasdaq. Asimismo, Micron Technology avanzó un 7.54% después de que Citigroup elevara su precio objetivo, lo que a su vez llevó al índice de semiconductores de Filadelfia a un nuevo récord. Este comportamiento generalizado de los mercados refleja un fuerte apetito por el riesgo entre los inversionistas.