A contracorriente de las pérdidas registradas en los mercados globales, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) logró cerrar la jornada del jueves con un ligero avance. Este desempeño positivo, aunque marginal, destacó en un entorno de aversión al riesgo a nivel internacional y mientras el peso mexicano se depreciaba. El principal índice accionario de México, el S&P/BMV IPC, finalizó la sesión con una ganancia del 0.06%, ubicándose en las 61,945.04 unidades, y logrando subir en tres de las últimas cuatro jornadas. Durante la apertura, el índice llegó a avanzar hasta un 0.42%, acercándose a los máximos históricos de 62,665.94 puntos anotados en la víspera.
Este comportamiento contrastó marcadamente con las caídas en Wall Street y otras bolsas europeas y asiáticas.
El avance de la BMV fue impulsado por el desempeño positivo de varias emisoras de peso.
Entre las alzas más destacadas se encontraron los títulos de Grupo México, que sumaron un 2.97%; Grupo Aeroportuario del Sureste, con un aumento del 1.51%; Grupo Aeroportuario del Pacífico, con un 1.14%; Bimbo, con un 1.15%; y Cemex, con un 0.79%. Al inicio de la jornada, los títulos del conglomerado Grupo Carso también encabezaban las ganancias. Esta resiliencia sugiere un apetito selectivo por parte de los inversionistas hacia activos mexicanos específicos, a pesar de la volatilidad externa y la presión sobre la moneda local.
En resumenLa BMV demostró una notable resiliencia al cerrar con una ganancia marginal, desmarcándose de la tendencia negativa de los mercados globales. El avance fue sostenido por el buen desempeño de acciones líderes en sectores como minería y aeropuertos, reflejando la confianza de los inversionistas en empresas locales clave.