Además, el peso se consolidó como la tercera divisa de países emergentes con mayor operación, solo por detrás del renminbi chino y la rupia india. Un dato relevante es que el 82% de las transacciones con el peso se realizan fuera de México, y el 89% de forma electrónica, lo que refleja su disponibilidad global las 24 horas del día. El Banco de México destacó que estos resultados "validan el esfuerzo y las acciones realizadas por las autoridades financieras mexicanas" para ofrecer condiciones transparentes y confiables, fortaleciendo la credibilidad del peso como un pilar del desarrollo económico del país.