Estas fueron las mayores caídas diarias para ambos referentes desde el 1 de agosto. La presión vendedora se intensificó después de que fuentes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (OPEP+) insinuaran un nuevo aumento de la producción de al menos 137 mil barriles por día, que se decidiría en su próxima reunión. Según el analista Ed Meir de Marex, "aunque (la OPEP+) está por debajo de su cuota de todos modos, al mercado sigue sin gustarle que entre más petróleo". A esto se sumó la noticia de que el crudo comenzó a fluir nuevamente por un oleoducto desde el Kurdistán iraquí hacia Turquía por primera vez en dos años y medio. En septiembre, el Brent acumuló una caída del 1.88% y el WTI del 2.30%, mientras que en lo que va del año las pérdidas son del 8.76% y 8.23%, respectivamente, reflejando un mercado cauteloso que equilibra los riesgos de suministro con la debilidad de la demanda.