Sin embargo, estas cifras cayeron por debajo de las expectativas. El analista de RBC Capital, Tom Narayan, señaló que la estimación de ganancias para 2030 estuvo "muy por debajo de la tasa de crecimiento que Ferrari proyectó en 2022". La firma de investigación CFRA rebajó la calificación de las acciones a "venta" y redujo su precio objetivo de 475 a 350 dólares, citando preocupaciones sobre una desaceleración del crecimiento.

El director ejecutivo, Benedetto Vigna, defendió las proyecciones afirmando: "No podemos comprometernos con algo que no podemos lograr".

A pesar del pesimismo, otros analistas como los de JPMorgan y Deutsche Bank se mantuvieron optimistas, citando la fuerte demanda que supera la oferta y mejorando la recomendación a "compra".