Este impulso se atribuye a varios factores clave.

En primer lugar, el optimismo generado por los avances en las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China, con una cumbre presidencial programada para el jueves, ha reducido la aversión al riesgo. En segundo lugar, existe una fuerte expectativa de que la Reserva Federal (Fed) anuncie un recorte de 25 puntos base en su tasa de interés, una medida que abarataría el financiamiento y estimularía la inversión. La analista Gabriela Siller, de Banco Base, señaló que “en Estados Unidos, las ganancias se deben a la expectativa de que la Reserva Federal recortará su tasa de interés mañana”. Además, el sector tecnológico ha sido un motor fundamental, con el alza de gigantes como Microsoft, que subió tras un nuevo acuerdo con OpenAI, y Apple, que superó los 4 billones de dólares de capitalización. Reportes de ganancias corporativas mejores de lo esperado, como el de United Parcel Service (UPS), también contribuyeron al sentimiento positivo, demostrando la resiliencia de la economía estadounidense. El avance se produce en una semana clave, con la publicación de resultados de las principales empresas tecnológicas, que se espera definan la tendencia del mercado en el corto plazo.