El optimismo fue impulsado por resultados corporativos trimestrales positivos y la decisión de la Reserva Federal de recortar las tasas de interés. En un claro contraste con el mercado mexicano, Wall Street vivió un mes de fuerte optimismo. El Dow Jones registró un avance mensual de 2.51%, mientras que el S&P 500 repuntó 2.27%.

Con estos resultados, ambos indicadores sumaron seis meses consecutivos de ganancias, una racha no vista desde 2017. Por su parte, el Nasdaq Composite lideró las alzas con una ganancia de 4.70%, ligando siete meses de avances.

Durante el transcurso de octubre, los tres principales indicadores bursátiles estadounidenses alcanzaron nuevos máximos históricos. Este comportamiento positivo se debió en gran medida a una temporada de reportes financieros que, en su mayoría, superaron las previsiones de los analistas, y al recorte de tasas de interés por parte de la Reserva Federal, que fue bien recibido por los inversionistas. El buen desempeño no se limitó a Estados Unidos, ya que en Europa los mercados también cerraron en terreno positivo; el DAX alemán avanzó un 0.32% y el FTSE 100 de Londres aumentó un 3.92%. La fortaleza de los mercados desarrollados subraya un apetito por el riesgo que no se replicó con la misma intensidad en mercados emergentes como el mexicano.