Este desempeño positivo coincide con noticias que destacan la capacidad y preparación del talento financiero mexicano para competir a nivel global.

El S&P/BMV IPC, el principal indicador del mercado accionario mexicano, finalizó en 63,376.13 puntos, lo que representa un avance del 0.45%. Por su parte, el FTSE BIVA también registró una tendencia alcista, cerrando en 1,263.75 puntos con una variación del 0.44%.

Estos resultados positivos son el campo de juego para los profesionales de las finanzas en el país, un sector donde México está demostrando tener talento de clase mundial. Un ejemplo es el reciente logro de estudiantes de la UDEM, quienes ganaron el primer lugar en una competencia internacional de trading. El profesor a cargo, Ricardo Salazar Garza, destacó que la preparación académica es fundamental, señalando que en su programa de Finanzas Internacionales es obligatorio acreditar la figura 3 de la Asociación Mexicana de Intermediarios Bursátiles (AMIB) para graduarse. Esta certificación es esencial para operar en el mercado de valores mexicano. El desempeño de los índices y el desarrollo de capital humano altamente calificado son dos caras de la misma moneda: un mercado financiero robusto requiere no solo de empresas sólidas que coticen en bolsa, sino también de profesionales con las competencias necesarias para analizarlo, gestionarlo y generar valor en él.