A pesar de este impulso, las ganancias fueron moderadas por factores que apuntan a una oferta abundante. Los analistas se mantuvieron firmes en sus predicciones de que el aumento de la oferta superará la demanda en los próximos meses. Además, existía preocupación por el impacto de las miles de cancelaciones de vuelos en Estados Unidos sobre la demanda de combustible para aviones. La semana anterior, ambos referenciales habían registrado caídas cercanas al 2% por temores a un exceso de oferta, lo que demuestra que el mercado sigue sensible a los fundamentales de producción y almacenamiento.