Las adquisiciones netas oficiales en el tercer trimestre sumaron aproximadamente 220 toneladas, un 28% más que el trimestre anterior.

Ante este panorama, las previsiones se han vuelto más audaces; J.P.

Morgan Private Bank estima que el oro podría alcanzar entre 5,200 y 5,300 dólares por onza hacia fines de 2026, lo que representaría una subida superior al 25% desde los niveles actuales.