Estos comentarios generaron nerviosismo y contribuyeron directamente a la depreciación de la divisa nacional en los mercados internacionales. Durante una intervención ante periodistas, Trump declaró que apoyaba tomar medidas contundentes contra la producción y el tráfico de narcóticos provenientes de México y Colombia. Al ser cuestionado sobre si apoyaría ataques terrestres en México para frenar el narcotráfico, el mandatario respondió: “Por mí está bien, lo que sea que tengamos que hacer para detener las drogas”.
Estas declaraciones tuvieron un impacto inmediato en el mercado cambiario.
El tipo de cambio alcanzó un máximo de 18.4620 pesos por dólar poco después de los comentarios, marcando una depreciación significativa.
Analistas como Gabriela Siller, de Grupo Financiero Base, confirmaron que la postura del presidente Trump afectó las cotizaciones. Siller explicó que las operaciones de "carry trade", que se benefician del diferencial de tasas de interés, dependen no solo de los rendimientos sino también de la percepción de riesgo. Las declaraciones de Trump aumentaron esta percepción, provocando que los inversionistas exigieran un mayor tipo de cambio para compensar la incertidumbre. El episodio subraya la alta sensibilidad del peso mexicano a la retórica política proveniente de Estados Unidos.







