Diversos factores contribuyeron a la debilidad del peso.

A nivel internacional, el dólar estadounidense se fortaleció, alcanzando su mayor avance semanal desde el 10 de octubre, impulsado por la especulación de que la Reserva Federal podría mantener su política monetaria restrictiva. A esto se sumó un entorno de aversión al riesgo en los mercados de capitales. Localmente, el factor clave fue la publicación de datos del INEGI que confirmaron una contracción del Producto Interno Bruto (PIB) de México del 0.3% durante el tercer trimestre de 2025. Analistas de Monex señalaron que "el tipo de cambio USD/MXN es afectado por el avance del dólar, ante un mayor nerviosismo en el mercado, así como por los débiles datos locales, que refuerzan la narrativa de desaceleración en la economía". Adicionalmente, comentarios del presidente estadounidense Donald Trump sobre posibles acciones militares en México para frenar el narcotráfico incrementaron la aversión al riesgo local a principios de semana. A pesar de haber iniciado la semana con una posición más fuerte, el peso acumuló cuatro jornadas consecutivas de pérdidas, ubicándose en la posición 16 entre las divisas con mayores retrocesos frente al dólar.