Para ello, los viveros estatales como “El Dorado” juegan un papel fundamental, al producir una amplia variedad de plantas locales listas para ser sembradas.

La campaña hace un llamado extensivo a la participación ciudadana, invitando a las y los tabasqueños a involucrarse activamente sembrando un árbol. Se busca fomentar una cultura de cuidado ambiental, especialmente entre la niñez y la juventud, promoviendo que los centros educativos cuenten con sus propios jardines. Los especialistas enfatizan que sembrar un árbol va más allá del acto en sí; es una contribución directa a la captura de dióxido de carbono y a la generación de biomasa, lo que beneficia directamente a la comunidad y al planeta. “Con el apoyo del Gobernador Javier May Rodríguez podemos lograr esta hazaña, en coordinación con universidades y, sobre todo, con el apoyo de la comunidad”, enfatizó un catedrático.