En medio de la devastación causada por las inundaciones en Veracruz, una historia insólita ha emergido como un símbolo de resiliencia y esperanza: el restaurante flotante “El Atracadero”, arrastrado por la corriente del río Tuxpan, fue encontrado prácticamente intacto a más de 250 kilómetros de distancia. El icónico establecimiento, fundado en 1979, fue desprendido de su anclaje en el malecón de Tuxpan la noche del 10 de octubre por la fuerza del desbordado río Pantepec. Videos captados por vecinos mostraron la estructura de dos pisos navegando a la deriva, convirtiéndose en una postal de la impotencia ante la furia de la naturaleza. Lo que parecía una pérdida total se transformó en asombro cuando, cuatro días después, pescadores de la zona costera entre Alvarado y Antón Lizardo avistaron la estructura flotando en el mar.
Al acercarse, confirmaron que se trataba del desaparecido restaurante, que mantenía su estructura original con daños visibles menores.
El hallazgo fue calificado por muchos como “un milagro entre tanta tragedia”.
Elementos de la Secretaría de Marina (Semar) acudieron al lugar para asegurar la edificación y remolcarla hasta el muelle de Alvarado, donde quedó bajo resguardo. La noticia se viralizó rápidamente, generando una mezcla de asombro y humor en redes sociales, con comentarios como “solo cambió de sucursal”. Aunque una parte de la estructura principal sigue desaparecida, la supervivencia de gran parte del restaurante se ha convertido en una anécdota que alivia, aunque sea momentáneamente, el dolor de una región golpeada por el desastre.
En resumenEl restaurante flotante 'El Atracadero', un ícono de Tuxpan, fue arrastrado más de 250 km por las inundaciones y encontrado casi intacto en Alvarado. El suceso, capturado en video y viralizado, se ha convertido en una historia de asombro y esperanza en medio de la tragedia que vive Veracruz.