Sin embargo, la mayor sorpresa llegó cuando el segundo módulo del restaurante encalló este viernes frente a las playas de Coatzacoalcos, cerca de la zona hotelera. La estructura, que permaneció notablemente intacta a pesar del largo viaje y el embate del mar, atrajo la atención de decenas de familias y curiosos que acudieron a la playa para observar y fotografiar el inusual hallazgo. Elementos de Protección Civil y de la Secretaría de Marina acudieron al lugar para custodiar la estructura y asegurar que no representara un riesgo, mientras la historia del viaje de “El Atracadero” se difundía como un símbolo de resiliencia y un peculiar desenlace de la tragedia.