Además, se entregaron 150 aparatos funcionales a grupos vulnerables.

En el ámbito alimentario, se gestionó la entrega de más de 298 mil raciones de alimentos en 33 escuelas y se distribuyeron 7,236 despensas. El programa “Un Apapacho al Corazón” entregó cinco mil abrigos, mientras que las “Noches de Danzón” se consolidaron como una tradición que reúne a más de 600 personas cada viernes. El presidente municipal, Omar Muñoz, reconoció el trabajo de Alfaro, agradeciendo su “gran corazón de servicio entregado al pueblo”. Tere Alfaro concluyó reafirmando que el verdadero legado de una administración “no son las obras de concreto, sino las del corazón”, y que su objetivo es trabajar “hasta que la dignidad se haga costumbre en Cuautlancingo”.