La rápida respuesta de los rescatistas evitó una tragedia y fue celebrada por la comunidad. La alerta se generó a través de un reporte a los números de emergencia, que informaba sobre un perro atrapado en la zona del cuerpo de agua sin posibilidad de salir por sus propios medios.

Al llegar al lugar, los bomberos tapatíos evaluaron la situación y procedieron con las maniobras necesarias para poner a salvo al animal.

El rescate se llevó a cabo con éxito, y el pequeño can fue recuperado sin lesiones aparentes.

Este tipo de acciones, aunque cotidianas para los cuerpos de emergencia, resuenan de manera especial en la comunidad, ya que demuestran el compromiso y la compasión de los servidores públicos hacia todos los seres vivos. La intervención no solo salvó la vida del animal, sino que también reforzó la confianza de los ciudadanos en sus equipos de primera respuesta, quienes atienden con la misma diligencia desde grandes emergencias hasta situaciones que, como esta, tocan el corazón de la gente. El exitoso operativo es un recordatorio del valor del trabajo de los bomberos y de la importancia de reportar cualquier situación de riesgo, sin importar su magnitud.