El Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) avaló la reforma de 2024 que sanciona la violencia vicaria, pero exhortó al Congreso de la Unión a legislar para definir con mayor claridad los elementos que configuran el delito en el Código Penal Federal. La decisión se tomó por mayoría de seis votos contra tres, en medio de un intenso debate donde una minoría de ministros advirtió sobre riesgos a la seguridad jurídica por la ambigüedad del tipo penal. La discusión se centró en una acción de inconstitucionalidad promovida por la CNDH contra los artículos que sancionan la "violencia a través de interpósita persona", argumentando que la redacción era imprecisa. La ministra ponente, Lenia Batres, defendió que la norma podía interpretarse correctamente en conjunto con otras leyes, postura que fue respaldada por la mayoría.
Sin embargo, las ministras Loretta Ortiz y Yasmín Esquivel, junto con el ministro Giovanni Figueroa, votaron en contra.
La ministra Ortiz advirtió que una tipificación incorrecta "es un instrumento más de injusticia que de justicia", y que un simple exhorto no solucionaría el problema. "Con un exhorto no se va a hacer abracadabra para que el Legislativo legisle correctamente. Se necesita invalidar para que tome conciencia de que está mal hecha la norma jurídica", afirmó. A pesar de la validación de la reforma, el exhorto al Congreso refleja las preocupaciones del máximo tribunal sobre la necesidad de una definición legal precisa para garantizar el debido proceso y la protección efectiva de las víctimas, en su mayoría mujeres que sufren agresiones a través de sus hijos.
En resumenLa SCJN validó la reforma que sanciona la violencia vicaria, reconociendo la importancia de proteger a las mujeres contra este tipo de agresión. Sin embargo, la decisión no fue unánime y el Pleno exhortó al Congreso a legislar para definir con precisión el tipo penal, atendiendo a las preocupaciones de una minoría de ministros sobre la ambigüedad de la ley actual y los riesgos para la seguridad jurídica.