Morena y sus aliados defendieron la ley, argumentando que garantiza recursos para programas sociales y obras estratégicas sin crear nuevos impuestos generales. Carol Antonio Altamirano (Morena) afirmó que se consolida la recaudación “mediante un mejor combate a la evasión fiscal y a una mayor eficiencia tributaria”.

Uno de los cambios más polémicos fue una reserva de última hora que modifica el tratamiento del IVA para las aseguradoras. Según Ricardo Monreal, se negoció un acuerdo para que las empresas desistan de juicios por un monto de 200 mil millones de pesos a cambio de pagar solo 20 mil millones, una medida que la oposición calificó como “condonación disfrazada” pero que el oficialismo defendió como un “estímulo fiscal” para recuperar recursos. También se aprobaron nuevas reglas para que los bancos deduzcan el ISR de créditos incobrables y un plazo de seis meses para que contribuyentes con créditos fiscales presenten garantías.