El nuevo tramo, que forma parte de la ruta completa Saltillo-Nuevo Laredo de casi 400 kilómetros, tendrá una longitud de 136.48 kilómetros de vía sencilla. El proyecto contempla la construcción de 52 puentes ferroviarios, 42 pasos vehiculares y dos estaciones de baja demanda en Lampazos de Naranjo y Anáhuac, así como una estación de pasajeros en Nuevo Laredo. Según Andrés Lajous Loaeza, titular de la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario (ARTF), los trenes alcanzarán velocidades de hasta 200 km/h, lo que permitirá reducir los tiempos de viaje a menos de dos horas desde Monterrey a Nuevo Laredo y a tres horas y media desde Saltillo. El gobierno estima que la construcción generará más de 10,900 empleos directos y cerca de 32,800 indirectos. El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya, celebró el inicio de la obra, afirmando que representa “una visión de futuro de la Presidenta Claudia Sheinbaum, que une a comunidades y familias” y que contribuirá a consolidar a Nuevo Laredo como la principal frontera de América Latina. El tramo urbano del tren, que conectará Escobedo y Santa Catarina en Nuevo León, aún no tiene fecha de inicio.