“Lo costoso no es invertir en prevención; lo costoso es no hacer nada.

Ni un niño más reclutado por el crimen”, afirmó el legislador. La reforma surge en respuesta a reportes que indican que más de medio centenar de iniciativas similares se encuentran estancadas en el Congreso, mientras el problema del reclutamiento de menores para actividades como halconeo, distribución de drogas o sicariato sigue en aumento.