¿Alguna vez escuchaste de NXIVM?
Sí, caray… te lo sé caray, porque ha habido un chingo de sectas”.
Aunque la conversación fue breve, el impacto fue inmediato. NXIVM, que se presentaba como un grupo de autoayuda y empoderamiento, fue desmantelado por las autoridades estadounidenses, y su fundador, Keith Raniere, fue sentenciado a 120 años de prisión por delitos que incluyen tráfico sexual y conspiración.
La organización tuvo una notable presencia en México, atrayendo a figuras de la élite empresarial y del espectáculo. La confesión de Polanco ha abierto un debate público sobre el alcance de su participación, con usuarios en redes cuestionando si fue únicamente una “víctima”, como ella afirmó en la conversación, o si tuvo un rol más activo, dado que han circulado fotografías suyas en eventos junto a otros miembros mexicanos señalados, como Emiliano Salinas.