El posterior reencuentro con su esposa fue un momento cargado de emotividad, con ambos rompiendo en llanto.

Sin embargo, la acción estratégica no pasó desapercibida.

La producción añadió una capa de tensión al prohibirle a Ayala revelar el pacto, bajo la amenaza de penalizar también a Aarón Mercury. Fuera de la casa, la decisión generó un intenso debate. Poncho de Nigris, tío de Aldo, reaccionó enérgicamente, asegurando que la dinámica fue una estrategia de la producción para “nivelar el juego” y calificó la acción como una “traición” que rompía la cohesión del equipo.