La única salvada fue Mar Contreras, quien ya era finalista.
El resultado se debió a que Shiky, el último en nominar, distribuyó sus puntos de manera precisa para que todos los miembros del ‘Cuarto Noche’ alcanzaran los votos necesarios para entrar en la placa. Aunque fue calificada como una “jugada maestra”, los espectadores rápidamente señalaron irregularidades en su comportamiento dentro del confesionario.
Los usuarios en redes sociales destacaron tres factores principales que alimentaron las sospechas de fraude: Shiky no llevaba sus lentes, parecía notablemente nervioso y evitaba mirar directamente a la cámara. Además, ‘La Jefa’ le indicó que comenzara su nominación asignando primero sus tres puntos, luego dos y finalmente uno, un orden inusual que, según los internautas, sugiere que estaba siendo guiado para ejecutar una estrategia planeada por la producción. La reacción de sorpresa de la propia Galilea Montijo al ver la placa final fue interpretada por el público como una confirmación más de que el resultado fue inesperado incluso para los conductores, reforzando la teoría de una intervención externa para generar un escenario de máxima tensión antes de la final.








