Sus compañeros, entre ellos Jawy, inmediatamente interpretaron sus síntomas como una posible gestación.

Fabiola Campomanes, sin dudarlo, le preguntó si ya se había hecho una prueba de embarazo, a lo que La Bea asintió afirmativamente, aumentando el suspenso.

La especulación llegó a tal punto que los demás "granjeros" comenzaron a hablar sobre quiénes serían los padrinos del bebé.

Sin embargo, la comediante desmintió rápidamente las suposiciones con su característico sentido del humor.

Aclaró que su malestar no era por un embarazo, sino por algo mucho más mundano: "No, no estoy embarazada; de hecho… fue culpa de los tamales que me comí". Su respuesta, "solo estoy inflamada", detuvo las especulaciones y provocó risas, convirtiendo el episodio en uno de los momentos más comentados y ligeros de la semana dentro de la competencia.