Medios como TMZ informaron que Combs fue sorprendido con alcohol casero, una mezcla fermentada de “refresco Fanta, azúcar y manzanas”.

Adicionalmente, CBS News reportó que el rapero realizó una llamada telefónica de tres vías no autorizada, lo cual está prohibido.

El equipo de Combs ha negado vehementemente las acusaciones. Un portavoz calificó los reportes de “falsos e irresponsables”, asegurando que el músico no ha infringido ninguna norma.

Sobre la llamada, su representante, Juda Engelmayer, sostuvo que fue iniciada por un abogado y estaba protegida por el privilegio abogado-cliente.

A pesar de las negaciones, la modificación en los registros oficiales sugiere que se aplicaron sanciones internas. Actualmente, Combs participa en un programa de tratamiento de adicciones y trabaja en la biblioteca de la capilla, buscando, según su equipo, enfocarse en su “crecimiento personal”.