Los documentos forenses confirman la causa del deceso y desmienten rumores que han persistido durante años. El informe, obtenido por la revista *Us Weekly*, confirma que la causa de muerte de la “Reina del Tex-Mex” fue una “hemorragia interna y externa exsanguinante” provocada por un único disparo de bala el 31 de marzo de 1995. El médico forense, Lloyd White, clasificó el caso como homicidio y detalló la trayectoria letal del proyectil: la bala ingresó por la espalda, en el área del hombro derecho, perforó el tórax y laceró la arteria subclavia, un vaso sanguíneo vital. El daño fue tan severo que la pérdida de sangre fue masiva e irreversible, haciendo que la muerte fuera casi instantánea. La autopsia también desmintió especulaciones de larga data, confirmando que Selena no estaba embarazada al momento de su muerte y que no se encontraron restos de alcohol ni drogas en su organismo. Esta información forense reafirma la narrativa del juicio que declaró culpable de asesinato en primer grado a Yolanda Saldívar, presidenta de su club de fans. Saldívar, quien siempre ha sostenido que el disparo fue accidental, solicitó la libertad condicional en marzo de 2025, pero le fue denegada.
Su próxima oportunidad para solicitarla será en 2030.
La reaparición de estos detalles coincide con el lanzamiento del documental de Netflix *Selena y Los Dinos*, que ofrece una mirada íntima a su vida y legado.













