Su éxito confirma el creciente poder del anime como una fuerza dominante en la industria del entretenimiento mundial. Desde su estreno en México el 11 de septiembre, la primera de tres películas que adaptarán el arco final del manga ha demostrado un poder de convocatoria sin precedentes. Según Crunchyroll, se ha convertido en la película de anime más taquillera de todos los tiempos en Latinoamérica, con una recaudación en México que supera los 16.6 millones de dólares (aproximadamente 307 millones de pesos). A nivel global, la cinta ha acumulado más de 605 millones de dólares, superando a éxitos de superhéroes de Marvel y DC estrenados en 2025.

El CEO de Crunchyroll, Raul Purini, afirmó que este éxito demuestra que "el fandom del anime ya no es un nicho, sino algo masivo", destacando que su audiencia es diversa y no se limita al público asiático.

La estrategia de marketing, enfocada en plataformas como TikTok, YouTube y Fortnite, ha sido clave para conectar con las generaciones más jóvenes. Ante la posibilidad de un estreno en China, se estima que la película podría alcanzar los mil millones de dólares en taquilla, consolidando a "Demon Slayer" como un fenómeno cultural que redefine los estándares comerciales para la animación japonesa.