La película explora la compleja relación padre-hijo entre el Dr. Victor Frankenstein (Oscar Isaac), un científico obsesionado y ególatra, y su Creación (Jacob Elordi), un ser trágico que busca aceptación en un mundo que lo rechaza. Del Toro declaró que “la idea central es qué significa ser humano”, y su guion profundiza en temas como el abandono, la culpa, la redención y la búsqueda de pertenencia. La transformación de Elordi en la Criatura fue un proceso monumental, requiriendo hasta 11 horas de maquillaje y la aplicación de 42 piezas prostéticas para lograr el aspecto deseado. La recepción ha sido mayoritariamente positiva, recibiendo una ovación de 13 minutos en el Festival de Venecia y cautivando al público en streaming, aunque algunos espectadores en redes sociales han señalado sus diferencias con la novela original de Mary Shelley. Para complementar la experiencia, Netflix también lanzó el documental “Frankenstein: Una lección de Anatomía”, que ofrece una mirada detrás de cámaras al proceso creativo del cineasta y su equipo.