El ambiente festivo, descrito como si fuera un concierto en vivo, demostró la vigencia del legado del artista. La proyección, que comenzó alrededor de las 20:00 horas en tres pantallas gigantes, incluyó material inédito del archivo personal de Juan Gabriel, ofreciendo una experiencia renovada del histórico recital que rompió barreras culturales al llevar la música popular al máximo recinto cultural del país. El evento contó con la presencia de Iván y Jean Aguilera, hijos del cantante, quienes fueron testigos del cariño del público. María José Cuevas, directora del documental, subió al escenario antes de la proyección para agradecer a los asistentes y gritar junto a ellos: “¡Juan Gabriel Vive!”. La productora Laura Woldenberg también estuvo presente y confirmó que no habrá una segunda parte del documental, ya que la serie de cuatro capítulos abarca la vida completa de Alberto Aguilera.
El evento fue un éxito rotundo, con una asistencia estimada por el gobierno de la ciudad entre 100,000 y 170,000 personas, quienes corearon al unísono himnos como "Yo no nací para amar" y "Amor eterno", refrendando su devoción por el ídolo.












