Un aspecto fundamental de esta edición es su impacto económico.

Se espera la asistencia de 15,000 visitantes y una derrama de entre 8.2 y 9 millones de pesos, una cifra significativa para la región serrana, que busca recuperarse de afectaciones recientes que disminuyeron la actividad turística.

López Birlain enfatizó el doble propósito del festival: “Este festival no es un concurso, es un espacio para compartir saberes y fortalecer nuestra economía y nuestra identidad cultural”.

Además, se busca asegurar la transmisión de conocimientos a las nuevas generaciones, con la participación de 120 niños y niñas formados en talleres de huapango y lírica popular.