Específicamente, el feminicidio se redujo un 29.2 %, el secuestro un 70 % y los robos con violencia un 48.6 %.

A pesar de la mejora general, siete estados continúan concentrando el 51 % de los homicidios dolosos del país: Guanajuato, Chihuahua, Baja California, Sinaloa, Estado de México, Guerrero y Michoacán.

En contraste, entidades como Zacatecas, San Luis Potosí y Quintana Roo registraron descensos superiores al 50 %.

El único delito que no muestra una tendencia a la baja es la extorsión, un fenómeno que las autoridades atribuyen a un aumento en la cultura de la denuncia por parte de las víctimas. El secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, atribuyó estos resultados a la coordinación entre fuerzas federales y estatales, que ha permitido la detención de más de 32,400 personas por delitos de alto impacto en lo que va del sexenio.