Tras una revisión exhaustiva, se descartó cualquier riesgo.

De manera similar, la FES Cuautitlán recibió una amenaza de bomba a través de redes sociales, lo que también llevó al desalojo preventivo del Campo Cuatro y a una inspección que no encontró ningún artefacto explosivo. Ambas facultades anunciaron que presentarán las denuncias correspondientes ante la Fiscalía del Estado de México para identificar a los responsables de generar pánico. Estos hechos reflejan el estado de alerta que se vive en la UNAM, donde la comunidad exige mayores medidas de seguridad, como la instalación de cámaras y botones de pánico, para prevenir futuros actos de violencia.